Neo futurismo

Joan look through the red eye, esperando al momento decisivo, aquel del que hablaba Henry Cartier Bresson. Despreciando tarjetas de memoria y versatilidad digital para hallar una única fracción en la que tiempo y espacio confluyen en perfección y armonía, en isócrona majestuosidad. Pero Joan no fotografía personas, sino lugares, así que después se para, espera de nuevo y vuelve a disparar y así hasta que tiene un abanico lo suficientemente amplio de momentos como para recrear una sensación y no un lugar.

Fotografía la ciudad buscando recovecos, brechas en la elasticidad temporal para encontrar un punto de referencia desde el cual todo se ve desde el mismo ángulo y su opuesto. Así, capta un estado de la materia en el que es tanto eso mismo, materia, como el breve instante que dura la obturación. Fusionandose ambos conceptos en bellas postales urbanas de perturbada geometría y colorista belleza.

Joan -qué también es un perturbado- expone en el bar Mushotoku de Madrid dentro de la exposición Espacios Comprimidos. Si tenéis algo de interés en la fotografía, la maleabilidad del tiempo, las dimensiones superpuestas o simplemente en el arte, tenéis ahora la ocasión de acercaros por allí a conocer su obra del 6 al 20 del corriente, buscar un Aleph en ella y huir de la monotonía otoñal a través de él.